Las Cooperativas resistieron bien la pandemia

Las cooperativas de ahorro y crédito han tenido un crecimiento significativo durante las últimas décadas. A finales de 2019, 7,6 millones de ecuatorianos eran socios de alguna cooperativa. En la pandemia han sido más resilientes, pues su rentabilidad y sus utilidades cayeron en menor medida que las de los bancos. Una de sus fortalezas, además, es la inclusión financiera, sobre todo en las zonas rurales.

En el año 2000 existían 300 cooperativas de ahorro y crédito en el país. En marzo de 2020, se contabilizaron 549, es decir, el número de instituciones casi se duplicó en 20 años. Asimismo, el número de socios creció de 6’263.780 en marzo de 2017 a 7’646.465 en diciembre de 2019.

Uno de los indicadores de rentabilidad es el ROE (return on equity, en inglés) el cual es un parámetro que mide el rendimiento. En otras palabras, la ganancia sobre los fondos propios.

Aunque otros de los indicadores del sistema financiero no han tenido mayor variación durante la pandemia, la rentabilidad y las utilidades fueron las más golpeadas. A septiembre 2020, las utilidades de las cooperativas tuvieron una variación anual de -37,3%, mientras que las de los bancos decrecieron -62,6%.

De igual forma, la rentabilidad de los bancos – siendo en general mayor a la de las cooperativas – cayó de manera pronunciada, llegando incluso a ser menor que la de las cooperativas, 4,7% y 5,4%, respectivamente.

No obstante, la caída de los bancos ha sido permanente desde enero de este año. Contrario a las cooperativas, que han podido mantener cierta estabilidad posterior a los efectos del COVID-19. El impacto mayor fue en marzo, apenas iniciado el confinamiento obligatorio, cuando la rentabilidad de las cooperativas cayó -24,3% y la de los bancos -31,6%.

Lo que sí, el Sistema Financiero Popular y Solidario (SFPS) enfrenta más retos a nivel tecnológico, pues -al igual que la banca- es importante que trascienda a la transformación digital. En el contexto actual, surge la necesidad de adaptarse digitalmente para tener capacidades de acción y optimización de procesos.

Las cooperativas juegan un rol fundamental en el desarrollo económico porque eliminan la restricción de liquidez presente en hogares de bajos recursos que no pueden acceder a un préstamo bancario porque su condición delimita un riesgo mayor. Además, los bancos se concentran en las urbes, mientras que las cooperativas en los últimos años han tenido un importante desplazamiento hacia zonas rurales, permitiendo de esta forma mayor disponibilidad de recursos para pequeños emprendedores.

Fuente:

https://revistagestion.ec/economia-y-finanzas-analisis/las-cooperativas-resistieron-bien-la-pandemia